Después de trabajar durante algún tiempo en sesiones segregadas por sexos, las mujeres con una terapeuta mujer y los hombres con un terapeuta hombre para generar espacios de mayor confianza y poder abordar cuestiones delicadas, en ocasiones relacionadas con violencias familiares y de género. Llevamos varias sesiones trabajando juntas en dependencias emocionales, aprovechando la riqueza de ser un centro mixto y nuestra experiencia en Psicoterapia de grupos. Estas sesiones aportan un gran valor al tratamiento de nuestras personas usuarias y generan mucho interés en ellas y ellos, demandando el continuar abordando estos temas en grupos mixtos, por la confianza que se ha generado.
Al trabajar con ambos sexos las dificultades y diferencias relacionadas con el género y con la reflexión de los materiales cuidadosamente elegidos en cada una de las sesiones, les ayudamos a visualizar diferentes situaciones vividas desde diversas perspectivas, creándose potentes vínculos de apoyo entre los/as participantes y sientendose valorados/as al ser escuchados y consideradas sus opiniones e inquietudes.
Trabajamos para empoderarnos juntas e internalizar las herramientas y recursos que nos permitan mejorar nuestras vidas. En Poveda, Mujeres y Hombres revisamos nuestros esquemas, nos reeducamos en igualdad y aprendemos juntas.